En el incidente que ocurrió en el octavo inning del juego entre los Milwaukee Brewers y los Tampa Bay Rays, se han otorgado suspensiones a cuatro personas involucradas en la altercación. El manager de los Brewers, Pat Murphy, el lanzador Freddy Peralta y el relevista Abner Uribe recibieron suspensiones, al igual que el jardinero de los Rays, José Siri. Peralta recibió una suspensión de cinco juegos por lanzarle a Siri, Uribe recibió una suspensión de seis juegos por su altercado con Siri, y Siri mismo recibió una suspensión de tres juegos. Murphy fue suspendido por dos juegos debido a sus acciones hacia los árbitros.
La pelea comenzó en el sexto inning cuando Peralta intencionalmente le lanzó a Siri, lo que resultó en la expulsión de ambos jugadores del juego. Sin embargo, las tensiones escalaron en el octavo inning cuando Siri y Uribe intercambiaron palabras después de un turno al bate, lo que llevó a puñetazos y a la salida de ambas bancas. La mala sangre había estado aumentando desde el jonrón en solitario de Siri más temprano en el juego, donde miró fijamente la pelota antes de completar las bases.
Tanto Uribe como Peralta han anunciado que planean apelar sus suspensiones. José Siri, el jardinero de los Rays en el centro del incidente, expresó confusión sobre la situación. Afirmó su inocencia en la altercación, declarando que no sentía haber hecho nada malo al celebrar su jonrón o al ser golpeado por un lanzamiento. A pesar de la animosidad mostrada durante el juego, Siri dejó en claro que no guarda rencor hacia Peralta y que no tenía problemas previos con él. A medida que las suspensiones entran en efecto, los equipos ajustarán sus alineaciones en consecuencia. El impacto de las suspensiones en ambos equipos y los jugadores involucrados aún está por verse a medida que se desarrolla el proceso de apelación. Es esencial que tanto los Brewers como los Rays aborden cualquier tensión residual y se aseguren de que incidentes similares no ocurran en el futuro.
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