El ex jugador de la G League, Chance Comanche, quien ha sido acusado de asesinato y secuestro en conexión con la muerte de Marayna Rodgers, no enfrentará la pena de muerte si es declarado culpable en el juicio. El abogado de Comanche, Gary L. Guymon, confirmó que el Estado anunció que no están buscando la pena de muerte en este caso. Esta decisión se tomó después de que Comanche se declarara no culpable de los cargos en una audiencia. El caso ha sido presentado por un gran jurado y procederá a juicio.
La ex novia de Comanche, Sakari Harnden, quien también enfrenta cargos de asesinato y secuestro relacionados con la muerte de Rodgers, será juzgada junto a Comanche. Harnden también se declaró no culpable de los cargos. Ambos están programados para comparecer en la corte el próximo miércoles para que el Estado fije una fecha de juicio.
Detalles del caso
Los cargos contra Comanche y Harnden están relacionados con la desaparición y muerte de Rodgers, una asistente médica de Lynnwood, Washington, que fue encontrada asesinada en Henderson. Según la policía de Las Vegas, Rodgers fue estrangulada el 6 de diciembre, y su cuerpo fue descubierto más tarde en una zanja en las afueras de Henderson. Un informe de autopsia reveló que la muerte de Rodgers fue causada por asfixia debido a la estrangulación, confirmando que el incidente fue un homicidio.
El caso ha recibido una gran atención debido a la implicación de un ex jugador de baloncesto y su ex novia. Tras su arresto, Chance Comanche fue liberado por Stockton, el afiliado de la NBA G League de los Sacramento Kings. Comanche, un ala-pívot y centro de 6 pies y 10 pulgadas, había jugado anteriormente en un partido de la NBA para los Portland Trail Blazers, donde anotó siete puntos y agarró tres rebotes. Su carrera en el baloncesto profesional ahora está en juego ya que enfrenta graves cargos criminales. La decisión de no buscar la pena de muerte en el caso de Comanche marca un desarrollo significativo en los procedimientos legales. El juicio conjunto con su ex novia agrega otra capa de complejidad al caso. A medida que avanza el proceso legal, el destino de Chance Comanche, tanto en el tribunal de justicia como en su carrera profesional de baloncesto, sigue siendo incierto.
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