El altamente anticipado debut del campeón de la NASCAR Cup 2021, Chase Larson, en la serie de IndyCar no decepcionó. Formando equipo con Arrow McLaren y Hendrick Motorsports, Larson completó 172 vueltas en el Phoenix Raceway el lunes. Originalmente programado para el martes, el test se adelantó debido a la amenaza de lluvia. Larson se acercó al día de pruebas con determinación, sabiendo que necesitaba «preparar su mente para eso». Después de completar «tres o cuatro horas» de pruebas, Larson expresó su satisfacción con el test, afirmando: «Creo que salió bien». Durante la sesión, Larson tuvo la oportunidad de familiarizarse con la pista, perfeccionar sus habilidades y ganar confianza en el circuito. Describió la experiencia como buena para «probar algunas cosas» y también practicar los procedimientos de parada en boxes.
Hacia el final de la prueba, Larson vivió un momento de emoción cuando casi pierde el control del coche mientras buscaba el límite. Sin embargo, su habilidad y reflejos rápidos le permitieron recuperar el control del automóvil. Reflexionando sobre ese momento, Larson admitió que había sido sorprendido, pero aseguró a todos que «nada de lo de ayer se sintió muy diferente a lo que se siente un coche de la Cup, un coche Next Gen». Le pareció que las características del coche Indy se asemejaban mucho a las del coche de la Cup, especialmente en Phoenix. Según Larson, la única diferencia significativa fue la mayor velocidad y la sensación más aguda del límite del coche. Aunque Larson sintió que había llevado su coche cerca del límite, creía que aún había más velocidad que desbloquear. «Sentí que cuando el coche tenía agarre, estaba cerca de optimizarlo, me gustaría pensar», explicó. Sin embargo, sin otro piloto en la pista con quien compararse, Larson solo contaba con los datos de 2018 de la carrera anterior de la serie IndyCar en Phoenix Raceway.
A pesar del desafío, Larson apreció la oportunidad de confiar en sus instintos y sentir el coche, comparándolo con «pruebas al estilo antiguo». Comparando la prueba en Phoenix Raceway con su salida anterior en el Indianapolis Motor Speedway durante el programa de orientación para novatos, Larson expresó que la experiencia en Phoenix fue «probablemente más incómoda». La pista más pequeña y el ritmo más rápido obligaron a Larson a reaccionar rápidamente y a soltar el acelerador en ocasiones. En contraste, en Indianápolis, Larson pudo ir a toda velocidad fácilmente después de navegar por las diferentes etapas del programa.
El debut de Chase Larson en IndyCar ha dejado al mundo de las carreras ansioso por los próximos eventos. Con su sólida actuación en Phoenix Raceway, Larson ha demostrado que puede adaptarse rápidamente al nuevo entorno y llevar su coche al límite. A medida que continúa adquiriendo experiencia y recopilando datos, el potencial de un éxito aún mayor en la serie IndyCar se vislumbra en el horizonte. Tanto los fanáticos como los competidores están ansiosos por la próxima aparición de Larson en la pista, donde sin duda continuará impresionando con su habilidad y determinación.
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