El nuevo era del Manchester United comenzó con un recordatorio de que hay grandes problemas en Old Trafford, pero terminó con la esperanza de que el futuro podría ser brillante después de todo. En su primer partido desde el anuncio de que Sir Jim Ratcliffe e Ineos han acordado comprar el 25% de las acciones del club y asumir el control de todos los asuntos relacionados con el fútbol, el United estuvo perdiendo 2-0 contra el Aston Villa antes de montar una impresionante remontada para ganar 3-2 gracias a dos jóvenes: Alejandro Garnacho y Rasmus Højlund. Garnacho, de 19 años, marcó dos goles y Højlund, de 20 años, consiguió su primer gol en la Premier League desde su fichaje de verano desde el Atalanta, para darle al equipo de Erik ten Hag su primera victoria en cinco partidos. Fue un impulso oportuno para el entrenador holandés, con el gurú deportivo de Ratcliffe, Sir Dave Brailsford, sentado en las gradas por primera vez. Brailsford, director deportivo de Ineos, formará parte del equipo encargado de transformar la fortuna del United, y al menos Ten Hag demostró que todavía hay vida en su reinado como entrenador.
La primera pregunta en su rueda de prensa posterior al partido fue qué pensaba Brailsford de su noche en Old Trafford. «No lo sé», dijo. «Tendrás que preguntárselo a ellos. No creo que haya tenido un impacto en los jugadores. Para mí, estuve informado durante todo el proceso, así que sabía lo que estaba sucediendo. «Estamos mirando hacia adelante. Creo que es positivo para el club que intervengan. Tienen mucha experiencia en el deporte de alto nivel, F1, un equipo de ciclismo, clubes de fútbol. «Solo pueden ayudarnos y apoyarnos para alcanzar nuestros objetivos. Estamos mirando hacia adelante. Quieren trabajar con nosotros y nosotros queremos trabajar con ellos».
Una remontada impresionante
Perdiendo 2-0 al medio tiempo, Brailsford probablemente pensó que necesitaría algo más que su filosofía de «ganancias marginales» para revitalizar al club en el que su jefe ha gastado cerca de 1.3 mil millones de dólares para comprar una parte. El éxito de Brailsford en el ciclismo británico, donde se hizo famoso, se basaba en aprovechar al máximo pequeñas victorias, pero después de 26 minutos aquí, parecía que tendría que ordenar una cirugía mayor una vez que el acuerdo de Ratcliffe sea ratificado. Dos veces en el espacio de cinco minutos, el United concedió un tanto de jugada a balón parado desde la izquierda. Primero, John McGinn envió un tiro libre que evadió a todos y terminó en el rincón más lejano. McGinn estuvo involucrado de nuevo momentos después, cuando su saque de esquina fue devuelto al área por Clément Lenglet, y Leander Dendoncker marcó el segundo tanto del Aston Villa. Esto provocó abucheos en Old Trafford y algunos fanáticos del United, que han visto a su equipo conceder el primer gol en siete de sus diez partidos de liga en casa esta temporada, se levantaron para irse. De las muchas cosas en la lista de prioridades de Brailsford, tal vez deba comenzar por la fuerza mental de los jugadores del United. Una y otra vez, conceden múltiples goles en cortos periodos de tiempo. Contra el Villa, fueron dos goles en cinco minutos. Fueron dos en seis minutos contra el West Ham el sábado y dos en cinco minutos contra el Bournemouth a principios de mes. Ya en esta temporada ha habido 10 ocasiones en las que el United ha concedido múltiples goles en un lapso de 10 minutos o menos. Si Ten Hag quiere rescatar esta campaña, es un problema que deberá resolver. «Dije en el entretiempo: ‘Sigan creyendo y ganaremos'», dijo Ten Hag. «Ya en la primera mitad jugamos de forma sólida. Fue un poco descuidado regalar dos goles en jugadas de balón parado».
Durante mucho tiempo, parecía que el United perdería un partido en casa el día de San Esteban por primera vez desde 1978, pero finalmente comenzaron a responder. Con el entrenador del Aston Villa, Unai Emery, decidido a persistir con su línea defensiva alta, Garnacho, Højlund y Marcus Rashford comenzaron a parecer jugadores en los que Ineos podría querer construir un futuro. Garnacho marcó los dos primeros goles y, con el ambiente en Old Trafford alcanzando su punto máximo, Højlund anotó por primera vez en 1.026 minutos de la Premier League para sellar la victoria. «Él marcará más goles», dijo Ten Hag. «Cuando los delanteros no marcan, siempre es un problema, pero él tiene un carácter fuerte, una gran personalidad y eso es lo que necesita un delantero, y cuando sigues invirtiendo los goles llegarán». Højlund gritaba en la Stretford End como alguien que sintió que se le había quitado un gran peso de encima y, aunque no quisiera admitirlo, su entrenador parecía igualmente aliviado después del pitido final. Con Ratcliffe, Brailsford e Ineos preparándose para dar paso a lo que esperan que sea una nueva era de éxito en un club que ha decaído durante una década, Ten Hag finalmente comenzó con el pie derecho.
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